PEDRO SÁNCHEZ CABALGA DE NUEVO

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Categoría: Opinión
Publicado: Miércoles, 22 Febrero 2017 17:45
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Pedro Sánchez cabalga de nuevo. Patxi López en clases de equitación. Susana Días se inclina por la hípica.

Pedro Sánchez ha conseguido instalar la incertidumbre en Ferraz y en los cuarteles autonómicos del PSOE. Barones y miembros de la vieja guardia le reprochan que su paso adelante retrotrae al trágico Comité Federal de octubre. Pedro Sánchez ha demostrado otra vez que le importa un bledo el partido regalando los oídos a la militancia. Ha recuperado el estás conmigo o contra mí, como un órdago, intenta nuevamente secuestrar al partido para llevar adelante una agenda imposible o destructiva. Una encuesta fantasma, que todo el mundo conoce pero que nadie ha visto, en unas posibles primarias, otorga a Sánchez 51 puntos frente a los 25 que obtendría Susana y los 12 de Patxi López. Un sondeo con el que los aspirantes oficiales prenden golpear a la presidenta andaluza que no quiere contaminar su papel institucional con una decisión que solo desvelará cuando los plazos se acerquen.

La percepción de que con la gestora el PSOE había pasado página parecía aflorar, pero la evidencia se impone y muestra un exsecretario general más crecido que nunca. En la concentración de Dos Hermanas en Sevilla se retrotrajo el momento al infausto Comité Federar del uno de octubre, y con un claro desafío a Patxi López que había permaneció junto a él y luego rompió amarras, y Susana Díaz que no acaba de deshojar la margarita: ¿Se presenta o no se presenta? Entre los barones y personalidades que apoyan a la presidenta de la Junta de Andalucía existe la convicción de que se presenta y barrerá, pero cuando la reflexión se impone la certeza se torna en incertidumbre que se ha instalado en Ferraz y en los cuarteles autonómicos. Un Comité Federal que podría celebrarse a principio de abril (ABC publica la noticia), convocará oficialmente la fecha de Congreso (el 17 y 18 de junio), y a mediados de mayo las primarias.

Susana Díaz cuenta con el favor de Felipe González y Rodríguez Zapatero, y con el apoyo de Guillermo González Vara, Emiliano García Page, Ximo Puig, Javier Lambán, y el presidente de la gestora, el asturiano Javier Fernández. Juntos van a poner toda la carne en el asador para derrotar a Pedro Sánchez (Patxi López no existe), pero sabiendo que si pierden ponen en riesgo el principal poder autonómico del partido y 30.000 millones de presupuesto. Aunque todavía no ha empezado a correr el reloj orgánico del partido, se están calentando motores en el inicio de una campaña, con estrategia perfectamente diseñada, para obviar a los contrincantes como mejor camino para llegar a Ferraz. A pesar de que Pedro Sánchez prefiere el cuerpo a cuerpo y un tono agresivo, amenazando con que ira hasta el final porque la militancia socialista tiene derecho a elegir y votar, Susana Díaz dejó claro que no está dispuesta a erosionar más al PSOE, por eso midió cuidadosamente sus palabras dejando en evidencia a distancia que les separa. Y con su discurso, ya manido: “Yo me veo donde me vean mis compañeros, en la cabeza o en la cola”. A Susana Díaz y sus seguidores les importa más el Congreso de junio que las primarias de mayo. Confían en que por muy ajustado que sea el resultado, por supuesto con victoria de la lideresa, lo importante será el control de los compromisarios.

Para Díaz, como para la mayoría de los barones que dieron el golpe promoviendo la gestora, el exsecretario general representa la mayor amenaza para la supervivencia de la organización, por eso se ha convertido en una prioridad rescatar al partido del peligro de Sánchez. El PSOE se encuentra maniatado, enfrascado en sus propias cuitas, se han olvidado de los problemas de los españoles. Ni paro, ni deuda, ni corrupción, ni separatismo catalán ni nada, solo conservar sus puestos y privilegios, la ambición del poder. Están tan obcecados que se han olvidado de la única posibilidad de regeneración que les queda, los votantes. Pero conservan la moral: con 85 escaños hemos conseguido subir el salario mínimo, hemos quitado la reválida, y estamos a punto de solucionar el principal problema de los españoles: que Franco sigue enterrado en el Valle de los Caídos. Imagínense lo que haríamos en el Gobierno. Nos lo imaginamos.

22-2-2017